sábado, 19 de julio de 2008

Las 5 de la mañana

Ayer a las nueve de la noche tenía 2 ideas en la cabeza sobre mi noche:
1. Llegar a casa y ver Piratas del Caribe cuando nuestros invitados (unos colegas y la novia de uno de ellos) se fueran
2. Levantarme a las 6 de la mañana para irme al curro

A las diez de la noche, cuando salí, todo había cambiado, mi noche no sería la misma. La película que nos había traído la mula era pornográfica (y sin Johnny Depp, con lo que no había ni el más mínimo motivo para verla) y me habían dicho que, en vez de entrar a las 7, hoy entraba a las 6.
Una hora menos de sueño y Jack Sparrow tan lejos como siempre.
Me acosté con el miedo en el cuerpo de quedarme dormida. Tenía motivos, los amigos se quedaron hasta las doce y media y cerca de las dos de la mañana aún no me había dormido... Tres horas de sueño! Toma ya!

De modo que lo pensé con calma...
La ropa colgada en la silla del salón para cambiarme allí directamente
Dos alarmas en el móvil con la música de Falcon Crest (gracias Kadesh!)
Mucha voluntad...
Nada de café.

Y tampoco tengo tan mal aspecto... aunque luego para ir al gimnasio y salir seguramente tenga que arrastrarme cual gusano pero eh... para presumir hay que sufrir
Lo bueno de descubrir las cinco de la mañana los fines de semana para ir a trabajar es descubrir a toda la gente en tu situación. Tu coche en la carretera, los otros coches, y, sobre todo, los locutores con cafeína en las venas que tienen la consideración de comenzar el día con Walking on sunshine... Un despertar perfecto, estás tan dormido que tu voz suena maravillosa coreando a Katrina and the waves y todos tus adelantamientos son perfectos, elegantes y sin molestar a nadie...
Y vives en un estado zombie, en el que no te das cuenta que tus movimientos son lentos, tu cara un poema psicodélico, tu piel blanca, tus ojeras berenjenales, tus bostezos parte de tu respiración y sólo deseas estirar los brazos para despertar... pero no puedes, y además hay sitio para aparcar el coche.

Cuando te sientas en el trabajo, con el uniforme puesto y una cara de sueño hasta los pies sabes que ya no habrá nada bueno esta mañana... Pero hasta las ocho apenas hay gente en el trabajo, puedes salir del estado de catatonia en el que vives...
O tal vez no...
Pero eso ya lo pensarás luego, cuando estés despierto...

Buenos días a todos!

1 comentario:

Anónimo dijo...

SINCERAMENTE: Mola trabajar los fines de semana.
¿Sabes? Suelo pensar... En vez de estar medio pedo tirado por la calle, en vez de estar gastando el dinero que te ha costado ganar... estas currando, siendo responsbale, un finde, sin gentuza, sin agobios, sin atascos. En el fondo, me molan los findes :D
Estoy pensando en cogerme días... no se cuales porque agosto pinta difícil... hasta septiembre... y mira que me mola.
Bueno, pues eso, que no lo mires tan mal que es bueno trabajar y ganar una paxta extra.
Que por cierto, de nada por la canción ¿a que mola??? jijiji
Ale, pues me voy a poner a comer que tengo haaaammmmbreeeee!!